Vecina Accidentada

Asistir en la ruta a la vecina accidentada lo lleva a un polvo de agradecimiento (Kiley Jay).

Regresando a casa ve una chica en el piso, se ha caído de la bicicleta y sin dudarlo baja para asistirla. Resulta que es su vecina, la joven Kiley Jay de 18 años que al parecer le está costando caminar. De inmediato le ofreció llevarla a su casa para curar la herida y tras subir el rodado llegaron a la sala. La joven tiene un top rosa, cabello pelirrojo y un short que parece estar funcionando mal. Ese detalle recién lo verá cuando se arrodille para higienizar la rodilla con un gesto que no puede ocultar. Y no es para menos, la mitad de la raja afuera, hasta los labios vaginales están colgando. Claro que ella se había dado cuenta pero le sirve de escusa para decirle gracias a este buen samaritano. Imposible rechazar la propuesta y con un beso todo comienza, luego se lleva una sorpresa. Al bajar el pantalón del muchacho se queda asombrada por el tamaño de ese palo. Igualmente lo empujó dentro de su boca procurando no raspar esa gruesa cosa con los dientes. De alguna manera se la arregla para que llegue entera al interior de su conchita. Pasará a hacerlo en cucharita para luego cabalgar logrando amoldar los papos al groso semental. Así la vecina accidentada deja en claro que toda buena acción debe tener esmeradas recompensas.