Siempre Dispuesta Mi Flaca Para Tener Sexo

Para la flaca es un placer recibirme, sabe que no andamos con muchas vueltas y que el sexo no tardará en llegar. Así pasó nuevamente hoy, en cuanto llegué a su casa comenzamos a besarnos y las manos empezaron a ir para todos lados, las mías y las suyas, ambos buscamos desnudar al otro, pero gano yo. El short blanco cae a los tobillos, bajo el body para descubrir los pechos y tras hacer que se de la vuelta se inclinará para que pueda darle unas nalgas como le gusta. La conozco en cada punto de sensibilidad, el oral es una cosa que la cachondea demasiado, sea dando o recibiendo, así que me arrojo a jugar entre sus piernas hasta que casi me ruega que la deja a ella. Allí está feliz jalando con una mano mientras la lengua empapa cada centímetro, me mira cada vez que mas duro me pongo con esa expresión de querer empezar. Fue a la silla para apoyar las dos rodillas, un codo en el respaldo y todo para que yo elija, empujé al fondo, siempre apretada, me muevo sin detenerme, solo cuando cambiamos de posiciones obtenemos un descanso. Como siempre vamos a enloquecer y finalmente me permite la corrida facial.