Quiero esa Bicicleta

Le parece si cambiamos esa bicicleta por un polvo.

Cada vez que hay una venta de garage, Jaye Summers (22) no puede ir a ver que puede agregar a su colección. Siempre consigue los mejores precios y nos dejará saber cual es su secreto. Hoy fue a la casa del vecino Marco Ducati que se está deshaciendo de todo lo que no usa. Camiseta blanca sin corpiño para que sus dulces tetis se marquen, shorts para que el hilo asome cuando ella quiera. Una bici llama su atención y realmente la quiere, comenzará a mirarla procurando que Marco esté cerca. Allí viene su primer movimiento donde enseguida consigue que le preste especial atención a su culo inclinado. ¿Cuanto pides? le pregunta esa muchacha, pero el número le resulta alto. Realmente quiero esa bicicleta mientras estira la mano para jugar con el bulto bajo el pantalón. Una tocada hace que el valor baje, pero no a lo que está dispuesta a desembolsar. Desprenderá la bragueta y sin mas comienza a pajear mientras lo ayuda a atender a otros clientes. Sin preocuparse del resto del mundo se lanzó al oral que seguramente la llevará a irse en dos ruedas. Escondidos tras el perchero empezaron a bajar ceros, pero irán dentro de la casa donde la rebaja será abrumadora.