
No Me Embaraces, Papá se Puede Enojar
Serena Avery y el socio de su padre tendrán un encuentro en la cocina, pero deben ser precavidos, nada de embarazos y para eso nada...
No todos tendremos la oportunidad de ver a madres en tanga, menos una como Cherie Deville (41) y mucho menos lo que vas a ver. Jay Romero ha sido invitado a almorzar por el amigo y en la confianza que tiene, ingresó sin golpear. Al ver que nadie responde sube al primer piso buscando a alguien y es allí donde esto se pone increíble. La madura, acaba de salir de la ducha lista para vestirse y preparar la comida. Ignorando la llegada del amigo del hijo no prestó atención dejando la puerta de la habitación entre abierta. Suficiente espacio para que el muchacho vea el cuerpazo de esta mujer que eligió rojo de ropa interior que quedará bajo el vestido de verano. Corriendo bajó las escaleras para fingir que nada ha visto donde recibe la noticia que su colega estará ocupado en el trabajo. Como buena anfitriona le pide que le haga la acompañe y se quede a comer junto a ella. Jay intenta ser respetuoso, pero aun sigue nervioso por lo que ha visto y torpe se mueve derramando agua sobre el pantalón. Comedida fue corriendo a buscar un repasador para secar justo en el lugar donde se causan las erecciones. Estoy bastante impresionada dice sin poder sacar la mano de ese lugar mientras va despejando ropa del camino en busca de un oral. Nada hizo por detener a esta amable señora que entrará en el pedestal de su mejores polvos. Pasa siempre cuando en este lugar aparecen «madres en tanga» pues si llegan aquí no es para conversar y nada mas.