Doctora Venezolana

Fue por un dolor de espalda y termina enroscado dentro de una doctora venezolana (Susana Alcala).

Ha llegado un nuevo paciente de urgencia al consultorio, es Pablo Ferrari con un fuerte dolor en la espalda, por suerte está la doctora venezolana lista a atenderlo. Susana Alcala (35) no mide mucho mas de 1.65 de estatura y tiene un uniforme con tremendo escote. En tanto él, con mas de 1,80 tiene vista preferencial del lomo de esas deliciosas gemelas. Poco sabe el caballero que esta latina está cachonda quien aprovecha cuando no mira, para frotar los pechos contra él. Claro que algo pasa abajo en el pantalón gracias a esas tocadas, que parecen profesionales. Pero nosotros que vemos sabemos que hay otra intención que queda en evidencia cuando le dice que debe desprender el pantalón. Con cuidado desprendió botón por botón y ver que tiene el perno depilado, mas la hizo calentar. Comenzó acariciando bolas, hablando en tono suave hasta lograr jugar con el palo.

Ya la consulta se va al carajo, esa mujer que parecía profesional puso saliva en los dedos y no dudó en sacar lengua. Nobleza obliga y quieto se queda mirando como juega en la cabeza. Ya mas en confianza y entendiendo que la consulta en si ha finalizar, pidió saborear pezones. Encantada se los presta para luego montarse en 69 para hacerle una cubana. Basta de ser mimoso, es hora de meter nariz en el orto de la doctora venezolana y hacerla empapar. Ya resbalosa se quedó quieta, apoyada en la camilla esperando que se atornille a su conchita latina. Van y vienen las protuberancias de esta señora que poco después terminará totalmente en pelotas. Cabalgando hace tambalear tanto la delantera que casi lo noquea de un tetazo. Por suerte logra esquivar cada tortazo y puede lamerlas de tanto en tanto. Luego lo hacen de reversa para pasar a cucharita consiguiendo que Pablo acabe sobre las areolas. Como vemos, le indicó el tratamiento correcto, a este hombre lo que le falta es hacer ejercicios.